En el artículo de hoy te venimos a hablar un poco acerca de una planta muy conocida por ser totalmente apta para su consumo, esta planta se conoce como el Zapallo Anco.
Aquí te vamos a ofrecer una pequeña y puntual guía informativa sobre las características que definen a esta planta, los cuidados que requiere, plagas y enfermedades y mucho más.
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Zapallo Anco
El zapallo anco también conocida como la calabaza o el anquito, recibe el nombre científico de Cucurbita moschata. Esta es una planta originaria de las zonas más cálidas de América y forma parte de la familia de las Cucurbitáceas.
Esta es una planta muy conocida y admirada gracias a su agradable sabor y al aporte de nutrientes que proporcionan sus frutos y sus semillas. Durante su crecimiento y desarrollo, esta planta se tiende a desarrollar como una guiadora rastrera y trepadora durante todo el año.
En cuanto a su estructura, cuenta con sus respectivos tallos, los cuales poseen múltiples nudos muy bien fuertes y definidos, en cada uno de estos nudos se desarrolla una hoja, la cual por lo general cuenta con dos yemas, una pequeño gancho que se enrolla alrededor de una superficie y sus respectivas raíces que se desarrollan siempre y cuando el nudo se encuentre sobre la tierra húmeda o durante la época de lluvia.
Características generales de esta planta
El zapallo anco es una especie monoica, esto quiere decir que la misma cuenta con múltiples flores masculinas y femeninas, las cuales se desarrollan se manera separada en la planta. Y por lo general, las flores masculinas tienden a desarrollarse mucho más rápido que las flores femeninas.
Durante su desarrollo, esta planta proporciona ciertos frutos, los cuales crecen en forma de pera y es considerada como una gran fuente de carbohidratos. Estos frutos se caracterizan por aportar al organismo una gran cantidad de ciertos aportes alimentarios.
En el caso de los frutos tierno, estos aportan un nivel elevado de vitamina C, mientras que los frutos que ya se encuentran maduros con sus pulpas amarillentas, aportan un nivel elevado de vitamina A. Además de su aporte alimentario, el zapallo anco es una excelente fuente de alimento apta para todo tipo de dietas ya que su consumo es de muy fácil digestión.
Dentro de estos frutos, se pueden encontrar las semillas de esta planta, las cuales son totalmente aptas para el consumo, además de que aportan al organismo un gran nivel de proteínas y aceites, además de ciertas propiedades medicinales.
Para obtener más ejemplares de esta planta, se debe llevar a cabo el proceso de multiplicación, el cual se puede llevar a cabo a través de las semillas implantadas en el suelo a una gran profundidad y con un sistema de drenaje adecuado.
Variedades del zapallo anco
En la actualidad, se pueden encontrar una gran variedad de especies de Zapallo, estas se diferencias en su estructura. Es decir, en la forma de sus hojas, tallos, raíces, apariencia y más. Algunas de estas especies son:
- El Frontera INTA: Esta especie de zapallo se caracteriza por ser una planta vigorosa, el fruto de proporciona es piriforme cilíndrico y una vez maduro llega a pesar de 1.2kg hasta 1.7kg y se presenta en un color naranja y es de muy buena conservación.
- El anquito Cokena: Esta planta se caracteriza por ser completamente amarilla o con múltiples ramas de color verde.
- Ancho: De color amarilla y crece en forma piriforme.
- Angola: Esta planta cuenta con un ciclo de vida extenso, proporciona frutos de gran tamaño en forma alargada, además de presentar un color verde oscuro.
Cuidados generales
Para disfrutar de los frutos que esta planta proporciona, se deben llevar a cabo una serie de cuidados generales y ciertos factores que se deben tener en cuenta. De manera que se permita un adecuado crecimiento y desarrollo del zapallo anco. Entre estos cuidados y factores fundamentales se pueden mencionar los que verás a continuación:
Época de siembra
La época ideal para sembrar el zapallo anco va a depender de la zona en la que se encuentre, por lo que es recomendable consultar con algún experto en cultivo para conocer la época de siembra ideal. Sin embargo, un dato importante a mencionar es que esta planta no crece con la presencia de climas fríos.
Es por esto que, lo ideal sería sembrar esta planta una vez que haya finalizado totalmente la época de invierno o en los últimos días de la época de la primavera. De esta manera, se podrán cosechar los frutos durante la época de otoño.
Para esto, es recomendable colocar de dos a tres semillas de esta planta en un hueco, es fundamental que este cuente con una profundidad de cinco centímetros. Esto también va a depender del tipo de especie que se desee cosechar, ya que en ciertas especies se suelen cultivar una semilla por hueco.
Suelo
Esta es una planta que puede llevar a cabo su proceso de crecimiento en diversos tipos de suelo, pero para estimular un crecimiento adecuado y el desarrollo de una cosecha de calidad, debe ser cultivada en un suelo totalmente fértil, suelto y que cuente con un buen sistema de drenaje.
En el caso de las zonas propensas a las lluvia, se debe ubicar al zapallo anco en un lugar en el que el agua no quede estancada. En el caso de los huertos, es recomendable implementar el proceso de abonado con ayuda de abono orgánico, este debe ser esparcido tres meses antes de proceder con la siembra de la planta.
Ahora bien, se debe tener muy en cuenta el lugar exacto y apropiado para sembrar a esta planta, ya que cuenta con un gran proceso de crecimiento. Dependiendo de la especie que se desea sembrar, se requiere de un espacio adecuado entre cada uno de los ejemplares, este espacio debe ser aproximadamente de una metro y medio a tres metros de distancia. Su ubicación ideal, seria en una zona muy soleada, esto se debe a que estas plantas son muy rudas y frondosas.
Condiciones climatológicas
Otros factores fundamentales que se debe tener muy en cuenta son el clima y la temperatura. Para que esta planta pueda crecer y desarrollarse, requiere de un clima templado y cálido. En cuanto a la temperatura, esta debe estar ubicada entre los 18°C y los 35°C.
Es fundamental que esta planta no crezca en temporadas muy frías, ya que estas temperaturas tienden a reducir la producción de flores y a retrasar su desarrollo general. De manera específica, se podría decir que esta planta requiere de un periodo aproximado de cuatro a cinco meses libre de temperaturas frías.
Proceso de siembra
Lo primero que se debe tomar en cuenta durante el proceso de siembra, es que las semillas de esta planta deben ser totalmente organiza o ecológicas. Es recomendable, que al adquirir estas semillas, sean de manera directa luego de consumir el fruto de la misma.
Para esto, es recomendable lavar muy bien la semilla y dejarla secar al sol durante dos tres días aproximadamente. Ahora bien, el proceso para sembrar estas semillas, puede ser de tres maneras, la primera en macetas, la segunda de manera directa en el suelo y la tercera en semilleros. En cualquier de estos casos, el proceso es un poco distinto.
- Macetas: Como ya mencionamos en puntos anteriores, esta es una planta que requiere de mucho espacio para crecer de manera adecuado. Es por esto que es recomendable contar con una maceta lo suficientemente amplia, ésta debe contar con una profundidad aproximada entre cuarenta y cincuenta centímetros. Una vez que se tenga la maceta, se debe colocar tres semillas a una profundidad de dos o tres centímetros. Es fundamental que entre cada semilla se guarde un espacio adecuado.
- Siembra directa en el suelo: En caso de sembrar esta planta directamente en el suelo, se debe tener muy en cuenta que, luego de haberla sembrado, se debe llevar a cabo ciertos cuidados en el suelo. Como lo es el rastrillado, de manera que se eliminen todo tipo de raíz o piedras que se encuentren alrededor de la planta. En este caso, se deben sembrar las semillas con una distancia de por medio de aproximadamente uno o tres metros. Al llegar el momento de la floración, es recomendable aportar a la planta cierta cantidad de potasio. Este puede ser a través de un té de banana, de manera que sus flores crezcan fuertes y firmes.
- Semilleros: Los semilleros son ideales cuando se cuenta con un clima frio, estos van a contribuir con el proceso de germinación de las semillas. En este caso, se debe mezclar un sesenta por ciento de tierra de semillero y el cuarenta por ciento restantes con humus de lombriz. Una vez realizado la mezcla, se deben colocar tres semillas por cada semillero, esto es fundamental y a que algunas semillas no llegan a germinar o crecen de manera muy lenta. Posterior a eso, se deben cubrir con tierra a un grosor de un centímetro y por último, solo se debe regar de manera frecuente y abundante.
Plagas y enfermedades
Cuando se trata del Zapallo anco, es muy común observar la presencia de ciertas plagas, como los caracoles y babosas, además de la mosca blanca y los pulgones. Para esto, es recomendable proporcionar un remedio casero muy implementado y eficaz en estos casos, este consiste en la mezcla de agua y ajo.
Una vez que la mezcla esté realizada, se debe dejar que la está macere durante un par de días. Una vez pasado los días, ya se podrá pulverizar sobre las hojas de la planta. En cuanto a las enfermedades más comunes, se puede mencionar al oídio. Esta enfermedad se basa en la pudrición de la parte superior de las raíces de la corona de esta planta.
Esta es muy fácil de diagnosticar, ya que se puede observar la presencia de una especie de polvo blanco en cada una de las hojas de la planta. Para tratar esta enfermedad de manera adecuada, es recomendable mezclar un galón de agua con tres cucharadas soperas de bicarbonato de sodio.
Una vez realizada la mezcla, debe ser aplicada con ayuda de un pulverizador en todas las zonas que se encuentren afectadas. Una manera eficaz de prevenir la aparición de plagas y enfermedades en la planta del Zapallo anco, es a través del control en la humedad de la misma y manteniendo sus frutos lejos del contacto directo con el suelo.
Consejos generales
El zapallo a diferencia de otras plantas, requiere de un contacto directo y continuo con la luz del sol, es por esto que únicamente debe ser ubicado en lugar despejado de árboles y paredes, ya que estos tienden a interferir con la luz solar.
Es fundamental que, el proceso de riego en la planta, sea llevado a cabo con el objetivo de mantener la tierra lo suficientemente húmeda sin llegar a encharcar. Es fundamental que las hojas de la planta no se encuentren húmedas, ya que esto es un factor que estimula la aparición de las plagas y enfermedades.
Debido a esto, es recomendable implementar el riego por goteo, esta es considerada como la manera la eficiente de cuidar esta planta, ya que contribuye a que la misma se mantenga lo suficientemente húmeda, evitando las inundaciones y favorece en el ahorro del agua.
Un factor muy importante que se debe tener en cuenta, es que el fruto de esta planta no debe estar en contacto con el suelo, de esta manera se estaría evitando que la humedad de la tierra comience a pudrir el fruto. Para evitar este contacto, se puede apoyar el fruto sobre una lona, piedras o madera.
También es importante protegerla del frío, en caso de haberla cultivado en una maceta, es recomendable que durante las épocas frías, se mantenga a la planta en el interior de la casa. Y si se encuentra cultivada en el jardín, se puede proteger con ayuda de un plástico, de manera que siga recibiendo la luz solar y se mantenga en calor.
Para finalizar, estos son todos los cuidados que se deben tener en cuenta para cuidar a la planta zapallo anco. Esperamos que esta información haya sido de gran utilidad para ti y de tu total agrado.
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